Cada vez escuchamos más sobre la domótica o las casa inteligentes y todas las ventajas que nos ofrecen estos avances tecnológicos. En el artículo de hoy te queremos hablar sobre este nuevo término y qué tiene que ofrecernos para hacernos la vida algo más sencilla.
Qué es la domótica
El término domótica viene del latín y viene a decir algo así como término relativo a los sistemas que automatizan las instalaciones en hogares y viviendas. Podemos definir entonces la domótica como el conjunto de ciencias que se ocupan de las tecnologías capaces de aumentar la calidad de vida en el hogar y en otros entornos en los que vivimos. Y todo ello se produce gracias a la automatización.
Además, el término “hogar inteligente” se refiere a un entorno doméstico equipado y diseñado de la forma más adecuada para facilitar las actividades que se desarrollan dentro del espacio vital.
La idea del hogar inteligente es aplicable a muchos aspectos de la vida doméstica. Por lo tanto, gracias a la domótica podremos controlar, entre otras cosas, las siguientes:
- la calefacción y el aire acondicionado de las habitaciones
- estancias iluminadas como nosotros queramos
- la apertura de puertas y ventanas
- el funcionamiento del sistema de alarma antirrobo
- apagar los aparatos a determinadas horas del día
Además, el buen diseño de un sistema domótico, y su correcto funcionamiento, conllevan al mismo tiempo un importante ahorro energético, eliminando consumos ocultos de energía que normalmente no nos enteramos.
Todos los electrodomésticos (basta pensar en el televisor) tienen indicadores luminosos que permanecen encendidos día y noche con un consumo continuo e inútil de energía. O cuántas veces dejamos las luces encendidas en habitaciones donde no hace falta porque no hay nadie dentro.
Se trata de comprender la importancia de tener una casa inteligente (smart house o smart home en inglés) tanto en términos de confort de vida como en lo que se refiere a un aumento de la eficiencia de la casa, con una reducción de los residuos y un importante ahorro en las facturas de calefacción y electricidad, con lo que se notará en tu bolsillo a final de mes.
Dónde se aplica la domótica
Aunque la palabra domótica hace pensar en un uso único del entorno doméstico, en la realidad actual se aplica a muchos otros ámbitos fuera del hogar particular.
La domótica es muy versátil y puede adaptarse bien a las necesidades de muchos usuarios finales diferentes. Su potencial es tan amplio que merece la pena enumerar algunos ejemplos como los que te enumeramos a continuación:
- en las viviendas particulares para mejorar la calidad de vida de quienes las habitan y reducir el consumo de energía.
- en los hoteles, para mantener la gestión global bajo control.
- en hospitales y clínicas, para mejorar la eficacia de la gestión y el entorno de la atención y la hospitalización.
- en barcos de pasajeros y yates privados, para controlar los distintos entornos en tiempo real, incluso a distancia.
- para los discapacitados, les permite hacer fácilmente cosas que de otro modo no podrían hacer si no es con la ayuda de otros, y con dificultad.
- en entornos industriales, con el fin de reducir los costes.
Ventajas de una gestión domótica
Para conocer todas las ventajas que tiene para ofrecernos la domótica, veamos primero qué ocurre si no disponemos de esta tecnología en casa, en el que cada sistema va por su cuenta (electricidad, calefacción, alarma, persianas) y que suele adolecer de los siguientes problemas
- Complejidad de la gestión: El usuario debe utilizar numerosas unidades de control, mandos a distancia y paneles de control independientes.
- Poca funcionalidad: El usuario no puede hacer un uso conjunto de las funciones de los distintos sistemas para optimizar el funcionamiento global de la casa.
- Rigidez de los sistemas: A menudo es imposible modificar el funcionamiento de un sistema tradicional, o tan caro como rehacerlo por completo.
- Consumo incontrolado: Un sistema tradicional no cuenta con la gestión de cargas y utilidades y el consumo está fuera de control.
- Poco confort: La gestión de la casa a través de interfaces separadas hace que a menudo no se aproveche el potencial.
Por contra, la domótica mejora mucho las cosas como estas:
Los recursos tecnológicos se comparten
Puedes gestionar fácilmente todos los sistemas de la casa (calefacción, electricidad, luces, alarma, televisión y equipo de música)
El sistema se vuelve flexible
Gracias a la domótica, todas las funciones pueden modificarse sin tener que tender nuevas líneas eléctricas
El sistema se simplifica
La automatización del hogar puede tener el efecto de reducir la extensión del cableado eléctrico y la necesidad de trabajos de albañilería relacionados.
Hay más seguridad
Hoy en día existen sensores de presencia y videovigilancia que permiten implementar sistemas de alarma muy avanzados. Y las tecnologías modernas controlan los sensores contra las fugas de gas, cuentan los inicios de los incendios y detectan los inicios de las inundaciones, todo ello con líneas eléctricas de baja tensión.
Tienes más comodidad
La domótica permite controlar de forma centralizada todo el “sistema doméstico”. Puede controlar la temperatura del interior de las habitaciones, la activación de la alarma perimetral o volumétrica, la difusión de música de fondo y muchas otras funciones directamente desde un panel táctil o con su smartphone.
Aprovecha la comodidad de los escenarios
Un sistema domótico le permite memorizar fácilmente secuencias de funciones, incluso muy complejas, que simplifican su vida cotidiana (escenario “despertarse”, escenario “estar de vacaciones”, escenario “salir por la noche”, escenario “fin de semana”, etc.).
Ahorro de energía
Numerosos estudios independientes demuestran que la domótica ayuda realmente a ahorrar energía. Un sistema avanzado de domótica también puede controlar los sistemas de producción de energía a partir de fuentes renovables (como los paneles solares) y siempre permite reducir el derroche de electricidad y gas.
Controla tu casa a distancia
Gracias a la domótica, tu casa puede ser controlada aunque estés lejos, desde cualquier ordenador conectado a internet o con tu smartphone.
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